Las DNS (Sistemas de Nombres de Dominio, en inglés Domain Name System) son un componente esencial de Internet que se utiliza para traducir nombres de dominio legibles por humanos en direcciones IP numéricas que las computadoras utilizan para identificar y comunicarse entre sí en la red. En resumen, las DNS actúan como una especie de «libro de teléfonos» de Internet, permitiendo que los navegadores web, aplicaciones y otros servicios encuentren servidores y recursos en línea a través de nombres de dominio fáciles de recordar en lugar de tener que recordar direcciones IP largas y complicadas.
Aquí hay algunas funciones clave de las DNS:
- Resolución de nombres: Cuando ingresas una URL en tu navegador web (por ejemplo, www.exactamente.com), las DNS traducen ese nombre de dominio en una dirección IP correspondiente (por ejemplo, 192.0.2.1). Esto permite que tu dispositivo se conecte al servidor web correcto.
- Distribución de cargas: Las DNS también se utilizan para distribuir el tráfico entre varios servidores web (balanceo de carga). Esto mejora la velocidad y la disponibilidad de los sitios web, ya que el tráfico se reparte entre múltiples servidores.
- Redirección: Las DNS permiten configurar redirecciones y registros de alias para que un nombre de dominio pueda apuntar a otro nombre de dominio o recurso, lo que facilita la administración de sitios web y servicios.
- Seguridad: Las DNS desempeñan un papel importante en la seguridad cibernética, al ayudar a detectar y prevenir ataques como el envenenamiento de caché DNS y el ataque de suplantación de DNS.
- Jerarquía: Las DNS operan en una estructura jerárquica, con servidores raíz en la cima, seguidos por servidores de dominio de nivel superior (TLD) y servidores de dominio de segundo nivel, y así sucesivamente. Esta jerarquía permite una búsqueda eficiente de las direcciones IP de los servidores.
En resumen, las DNS son una parte fundamental de Internet que hace que sea más fácil y conveniente para las personas y las máquinas navegar y acceder a recursos en línea mediante nombres de dominio en lugar de direcciones IP.